Luego de casi tres años de trámites, estudios y diseños, ajustes, reacondicionamiento a nuevas normativas urbanísticas se logró obtener la Licencia de Construcción en la Curaduría Urbana N° 1 de Tunja para el proyecto inmobiliario de la SBIA.

El costo de la licencia ascendió a más de 127.436.835,08 millones de pesos y estará vigente por dos años contados a partir del 21 de septiembre de 2021 con la RESOLUCIÓN No. 15001-1-21-0863

En este año se cumplieron los 61 años de fundación de la SBIA.  En días pasados se celebró la sesión solemne de este aniversario de la Sociedad Boyacense de Ingenieros y Arquitectos (10 DE SEPTIEMBRE DE 1960 – 10 DE SEPTIEMBRE DE 2021), en nuestras instalaciones se reunió la Junta Directiva y administrativos para conmemorar esta fecha.

Recorrer Colombia por carretera y entrar por sus pueblos le da a uno la oportunidad de apreciar sus paisajes. Pero, a su vez, permite darse cuenta de una realidad triste y poco esperanzadora: la mayoría de la infraestructura del país no solo es obsoleta, sino de mala calidad. El origen de esto proviene de diferentes fuentes: corrupción, pobres estándares de calidad y profesionales con pocas competencias.

Muchos se sentirán ofendidos o aludidos con lo escueto de mi afirmación. Incluso la Sociedad Colombiana de Ingenieros (SIC), el Ministerio de Educación Nacional de Colombia (MEN) y el Consejo Profesional Nacional de Ingeniería (COPNIA) estarán en desacuerdo conmigo. Como en todo, siempre hay excepciones; pero créame que no es la norma en el país. Hay algo de lo que poco (o nada) se discute en Colombia y que es claro en otros países desarrollados: una cosa es graduarse de un programa de ingeniería y otra es tener licencia para practicar/ejercer la profesión. Sí, así como lo lee, no son lo mismo. La diferencia radica en que el primero solo ha completado un programa académico; mientras que el segundo, además, ha demostrado las destrezas y el conocimiento adquirido, a través de la experiencia, para ser acreedor de la licencia de ingeniero profesional y poder, entre otras, firmar y revisar diseños, construir, servir como expertos ante una corte/tribunal y hacer avalúos.

Las comparaciones son engorrosas, pero a veces necesarias para poder darle al lector una mejor perspectiva. A continuación, explicaré los procedimientos para obtener una licencia (matrícula) de ingeniero civil profesional en Colombia y en los EE. UU. (uno de los países con el sistema más riguroso/estricto en este proceso):

En Colombia, el recién graduado solo tiene que presentar ante el COPNIA su documento de identidad legible por ambas caras, acta de grado, diploma de grado o título académico obtenido y pagar COP$480,000 que cuesta el trámite. En dos meses, aproximadamente y como por arte de magia, usted ya tiene permiso para ejercer legalmente la ingeniería.

En EE. UU., es un proceso de dos pasos:

Paso 1. Usted, desde el último año de su carrera, puede aplicar (a través de un formulario y el pago de una tarifa) a los respectivos cuerpos colegiados de la ingeniería de cada estado para ver si le aprueban tomar el Examen Fundamental (Fundamental Exam), el cual es un examen de seis horas de duración (antes eran ocho) y 110 preguntas en el que se evalúan varios temas: Matemáticas y Estadística, Ética y Práctica Profesional, Economía para Ingenieros, Estática, Dinámica, Mecánica de Materiales, Materiales, Mecánica de Fluidos, Topografía, Recursos Hídricos e Ingeniería Ambiental, Estructuras, Geotecnia, Vías y Transporte, Ingeniería de la Construcción (para ver el listado en detalle haga click aquí). Si pasa el examen, a usted se le cataloga como un Engineer-In-Training (ingeniero en entrenamiento). Usted no puede aún firmar ningún documento o planos.